Algunos aquí recordarán parte de
aquella conocida frase de B.B. King donde decía “dame 6 cuerdas y seré feliz”,
en el caso de la música, alcanzas el pleno cuando obtienes el producto que
querías plasmar, más meritorio aún es el hecho de hacer ver fácil lo que en
verdad es difícil, cuando todo el mundo sabe de sobra que no es ni mucho menos
sencillo que todas las partes armonicen en pro de un mismo fin. Un sonido
directo, sin mayores florituras, con los fundamentos básicos que una banda debe
tener y sobre todo muy potente, los únicos ingredientes que requirió
Thunderhell para editar “Hell Trip”
todo un golpe seco al estómago cuya portada ocupa la sección “disco del mes” en
este blog.
Cierto tiempo ha transcurrido desde
que lanzaran su debut “Hate”, el
cual ya mostraba maneras muy honestas. “Hell
trip” dice mucho de la notoria y constante mejoría de la banda, incluye los
cuatro temas de su anterior producción y cinco nuevos, poco más que añadir,
digno del efecto martillo en el rock & roll, un sonido que pocos hacen o se
atreven a hacer o dar continuidad hoy día, llevando trepidantes compases de los
70 y 80 a un grado algo más intenso, hecho en nuestro país 100% por si los
incrédulos aún no caen en cuenta. Si eres acérrimo de Lemmy y su pandilla, ZZ
Top o Pantera, agradecerás los casi 40 gratos minutos de pura energía que
Thunderhell ofrece, dicho esto sin exageración alguna, veamos que ofrece cada
tema.
“Hell
on Earth” es señal que de principio a fin no habrá ningún descanso, y marca
los denominadores comunes del disco, baterías trepidantes, letras en un inglés
muy bien pronunciado y perfectamente audible, crujidos rítmicos contagiantes y
variedades en el uso de la pentatónica, recurso que aún los más virtuosos del
planeta incluyen obligatoriamente entre sus recursos, el solo es de los más
extensos y coloridos junto al del propio “Hell
trip”, un excelente comienzo.
“Hate”
solo por el nombre se dice todo, lo más desbocado de todo el trabajo, tocan a
una o dos marchas más de velocidad, shredding
muy breve pero que tampoco se extraña demasiado, considerando la
violencia de la pieza, si este corte no formase parte de las presentaciones en
vivo sería un insulto a la inteligencia y ameritaría un jalón de orejas, pues
garantiza un “moshpit” de los buenos.
Acto seguido suena “City of doom”,
de lo más distendido y quizá la pieza más sencilla, lo cual tiene su lógica
dado que fue de los primeros temas que compuso la banda, sin mucho mayor
detalle continúa siendo rock & roll, música como modo de entretenimiento
más sincero.
Corresponde el turno al que considero
el principal de los 3 temas que más me gustaron, “Murderer” es una de esas siempre requeridas “canciones distintivas”,
donde sin perder la temática o la esencia muestran una cara distinta, tan
pausada como pesada, tiene ese aire a lo Texas Hippie Coallition que a muchos
tanto gusta, dando descanso a los riffs acelerados para dar algo más de espacio
a una perfecta armonía entre voces y baterías, sobre la sección solista puede
decirse con total propiedad es junto a la del tema homónimo “Hell trip” lo mejor del disco. “Sweet madness” va en una onda similar a
“Hate” pero de mucho menor duración,
aparecen nuevos elementos como el uso del wah wah y solos de bajo, el final es
bastante similar a “More than meets the
eye” de Testament.
Ahora sí aparece “Hell trip”, el tema con mayor cantidad
de variantes, hay un poco de todo, como si cada uno de los integrantes toma
cierta cantidad de tiempo para agregar sus ideas, es un híbrido entre “City of doom” y “Murderer”, un corte bastante bueno
que dice mucho de cómo se manejan las cosas en la banda.
Para quien e guste el blues o ese
sonido de los 70 que escuche detenidamente “Heather”, otro de los temas aparte, digno de acompañar con unas cuantas cervezas
y bordado con 28 segundos de armónica que dan a este trípode de excelentes
músicos un plus en el repertorio, “Heather” es como una rana frente a una
culebra si se compara con el que le sigue, pero con la misma cantidad de
veneno, “Fight your truth” es el
punto y aparte, la vuelta al frenetismo con unas triadas guitarreras brutales
que implican un condimento más thrash y es cuando finalmente el oyente cae en
cuenta que se ha contagiado irremediablemente del pegajoso ritmo en la
totalidad de este disco.
Para finalizar dejan uno de sus
clásicos, “Southern Whorehouse”, al
cual pongo pros y contras, por una parte es un tema rabioso pero también
fiestero, el apellido así como la letra dicen metal, ni más ni menos, pero a su
vez se considera pudo tener mucho más poder ¿Por qué no fue reeditado con la
calidad de sonido que posee “Murderer”
por ejemplo”? lo mantuvieron tal cual y ya aquí se diluye en algo la
contundencia con la que venían sonando desde el primer segundo dada la evidente
diferencia que se nota desde el primer repique en las baterías. Sinceramente
sería muy bueno que lo vuelvan a mezclar en tiempos futuros, no obstante es el
único “pero” que se puede colocar a un disco tan sincero.
“Hell
trip” es un verdadero tributo a los clásicos de siempre y parte del aire
fresco del panorama rockero/metalero nacional. Thunderhell sin ningún tipo de complejos se dedica a lo que bien
sabe hacer y que le ha dado el reconocimiento que tienen hasta ahora, quizá no
son la mejor banda del mundo o la más innovadora… ¿pero a quién le importa? En
la música las competencias son un auténtico absurdo duela a quien duela, dignas
de una equívoca obsesión o depresión adolescente, y esta banda sabe tener los
pies en la tierra y no se dejan llevar por ese perjudicial entorno que creen
que tocar significa creerse mejor que todos y pasar todo el día en foto
estudios o intentando llamar la atención, cada miembro colabora con lo suyo y
al final simplemente dicen “somos Thunderhell
y venimos a hacer rock”, no hay que olvidar que la simpleza puede llevarte a la
grandeza cuando las cosas se hacen bien. ¿Se imaginan a estos tres panas en una gira nacional con Arrecho, Étnica y Ética etílica? El tiempo de sobriedad en la audiencia sería en exceso breve, su música así lo inspira. Respetos.
Thunderhell es:
- Luis Daniel Loaiza (Bajo/Voz)
- Juan Betancourt (Guitarras)
- Joel Barranco (Batería)
Contacto: http://www.thunderhell.com
Nota: 9/10
Reseña: Carlos Terán
Feedback Radio Metal Venezuela