Se trata de un disco 100% cañero, Thrash metal en estado puro y sin destilar, letras sociopolíticas, amplio y estridente crujido de cuerdas, potente batería y voces desgarradas. La influencia de la escuela y vanguardia alemana es más que notoria. Si bien el anterior “Revenge of the Beast” tenía voces algo más oscuras y la velocidad era algo mayor, este “Guerra Asimétrica” deja clara evidencia de la evolución (siempre positiva) en cuanto a sonido y técnica se refiere.
La destrucción se inicia con “Retorciendo la realidad”, mejor título imposible una introducción acústica muy cuidada donde pareciera que todo a nuestro alrededor es muy relajado, tranquilo, en normalidad y aparente calma. Hasta que irrumpen con las primeras notas de “Crónicas de un miserable” (si no lo recuerdan aparecen de fondo en el DVD casero que editó la banda hace unos años). Un temazo bien brutal, es como devolverse en el tiempo y escuchar temas del “Cause for conflict” de Kreator. La olla empieza a hervir. “Guerra Asimétrica”, tema título, pesado y contundente, refleja la dura realidad, no se necesita tanta velocidad para que el cerebro quede atrofiado de tanto golpe en 5:04 minutos. Un solo agudo y cortante, con mucha técnica e inspirador. ¿Es necesario tratar de emular a Yngwie Malmsteen para ser un “destacado” con la guitarra? Con este tema se responden ustedes mismos con un “No” rotundo. Es cuestión de carácter y personalidad.
Los covers de Ratos de Porao y Brutal Assault (“Beber hasta Morir” y “Game Over" respectivamente) muy correctos y bien ejecutados. Al estilo Blasphemy, no hay mucho más que decir.
“Agent Orange”, “Betrayer” y un tema de The Haunted que ahora mismo no recuerdo, piezas de culto que vienen a la mente cuando suena “De la mano con el diablo”, el cual junto a “La configuración de los lamentos” resulta de los temas más entrecortados, con muy buenas variedades de ritmos y cambios. Aptos para los que solo deseen sacudir la cabeza o bien descansar de la paliza que recibieron previamente.
Y finalmente a juicio de este servidor, la masacre final, la última gota (de la primera cerveza de la noche), los mejores tres temas del disco. Primero y principal “Hipocrifeus”, la más brutal descarga con un intermedio de ritmos latinos. Muy original y perfectamente estructurada. “SMM” tema al cual considero fijo para las presentaciones en vivo, da la hora de jalar y apuntar el gatillo para posteriormente sacar la artillería pesada, la cual se desata finalmente con una “Dosis de Odio”. Este último tema si bien le considero el mejor de todo el disco, hubiese sido mejor si lo grabasen con el sonido de las canciones anteriores, la batería no suena con la misma potencia. Aún así, las guitarras resultan en una eufonía perfecta. Broche de oro para casi una hora de embriagante Thrash Metal. El metalero venezolano debe de una vez por todas mirar lo que tiene en su casa antes de ir y buscar por fuera, pues Blasphemy con su constancia, son un claro ejemplo de algo que tienen más que ganado y merecido, y eso se llama Respeto.
Nota: Carlos Terán.
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